sábado, 20 de octubre de 2012

Capìtulo 8 Concierto

Entre la oscuridad de aquel dormitorio podía escuchar unos murmullos, ya no sentía a Fernando en mi brazo, pero no quería abrir los ojos para ver qué pasaba, tal vez solamente era cosa de mi imaginación. Seguía escuchando los murmullos y uno que otro levanto de voz, no sabía que pasaba pero no era algo bueno.



Abrí mis ojos lentamente y vi como Fernando acompañado de otra persona salía de la habitación, ahora me encontraba sola nuevamente. Volví a cerrar mis ojos, estaba cansada, no tenía muchas fuerzas para ir de tras de mi amado, y mucho menos sin saber quien era aquel hombre que se lo había llevado de mi lado.



Me vestí pensando en Fernando y la noche que habíamos pasado juntos, salí de aquel lugar en donde ni un alma se encontraba, el lugar daba un poco de mal espina al verlo tan vacio y sin ninguna luz de vida.



Salí a la calle en donde la luz cerró mis ojos, cogí nuevamente el metro el cual me llevaría de vuelta a mi hogar, me imagino que Chris y ellos deben de estar más que preocupados.



Subí las escaleras y camine hacia el gran rascacielos en donde habitaba, toque la puerta del departamento.

- ¡Carla! Por dios mira qué hora es, nos tenías preocupados, ¿en dónde te has metido?- dijo Isabel viendo que estaba bien-.
- Es una larga historia, tenía algunas cosas que hacer- dije bajando la mirada-.
- A mí no me mientes Carla, tú estabas con ese vampiro, recuerda que leemos la mente, cuéntanos todo- dijo Alicia con mirada seductora-.



Chris por su parte intentaba penetrar en mi mente pero esta vez no permitiría que nadie entrara, no era un libro abierto para que leyeran mis pensamientos, me senté en la sala y proseguí a contar lo que había pasado, claro sin lujo de detalles para no levantar celos entre ellos.



-Bueno por lo menos te encuentras bien cariño, pensé que te había pasado algo malo, mira que salir corriendo del departamento y perderte toda la noche y parte de la mañana levanta sospechas entre nosotros- dijo Isabel, parecía que cuando se ponía nerviosa hablaba mucho-.

-Pero bueno lo importante es que estas a salvo, por cierto hoy tendremos un concierto y nos daría gusto que fueras- dijo Marco viendo a Chris el cual se ponía nervioso-.

-Claro sería un gusto para mi, ¿a qué hora será?

-Es dentro de dos horas, pero hay que llega con tiempo o se nos ara tarde para prepararnos- dijo Chris-.



Me bañe, en donde pude ver algunos moretones en mi cuerpo, la fuerza que había hecho Fernando en mi había dejado sus marcar, ahora entendía porque me pregunte si estaba segura de lo que haríamos, pero ya nada importaba, ya todo se había hecho y no había vuelta atrás.



Termine de vestirme en mi habitación y salí a la sala para encontrarme con mis compañeros, aunque llevaba pocos días conociéndolos les cogía confianza y un poco de cariño, por el simple hecho de que se preocupaban por mí.



-Bueno veo que te has puesto algo negro Carla, así combinas con nosotros- dijo Chris viendo mi atuendo-.

-Si es que hoy hace un poco de frio y dicen que el negro atrae el calor- dije intentado hacer un poco de conversación-.

-Bueno niña para mí el negro es frio- Dijo Isabel- pero claro cada quien tiene una perpectiva diferente, por ejemplo para mí la sangre es comida y para ti es lo que te hace vivir- dijo caminando a la puerta-.

-Bueno por lo menos haces combinación con nosotros, sacando si es frió, caluroso o neutral lo importante es que nos verás Rokear- Dijo Marco-.



Nos marchamos al lugar, no había visto la hora eran las 4 de la tarde, ya entendía porque tanta preocupación por parte de ellos. El lugar no estaba lleno ni mucho menos vació, tenía poca cantidad de personas pero era lo suficiente para dar un concierto, la tocada se había recorrido hasta las 6 ya que el sol estaba muy fuerte y a los vampiros les afecta el sol, la escusa perfecta fue que faltaba un vocalista.



-¡Vocalista!, si ustedes solo tocan, ni cantante tienen- Dijo Alicia con una risita-.

-Bueno si quieres nos quemamos, pero no lo tenemos en nuestra agenda- dijo Marco con ganas de matar a su amiga-.

-¡Ya!, bueno por lo menos se salieron de ser quemados hoy mismo, bueno tu Chris si quieres ve y ponte en el solo de por si nunca me has caído muy bien- Dijo Isabel-.

Caminamos a una zona techada, en donde esperaríamos que el tiempo pasará



Chris por su parte solo caminaba en círculos, era su 4 tocada y estaba nervioso, por otra parte Marco parecía que nada le afectaba, llevaba el mismo tiempo que Chris en la música pero nada le molestaba.



-Isabel mirad quien ha llegado, si es nuestra amiga la vidente, tanto tiempo sin verla- dijo Alicia viendo a una joven que se acercaba a nosotros- gracias a dios no sabe que somos vampiros porque si nos moriríamos- dijo en un susurro-.



-¿Qué es lo que ella hace?- pregunte con un poco de curiosidad-.



-Bueno niña, ella es una vidente, no es una bruja, si no solo ve el futuro, aunque ella odia a los de nuestra clase porque alguna vez se enamoró de uno y no fue correspondida- dijo Marco viendo a la mujer acercarse más-.



La mujer de cabello negro y ojos cafés se acerco a nosotros, saludo de beso a mis compañeros. Se detuvo enfrente de mí intentando saber si me conocía, pero no era imposible que yo tuviera contacto con esta mujer en tiempo pasado por lo cual me presente.

-Mi nombre es Carla García, un placer conocerte- dije cordialmente- ¿Cuál es tu nombre?-.

-Mi nombre es Amanda- me dio la mano como es debido, se me quedo observando con una frialdad y prosiguió hablar nuevamente- tú tienes un destino muy oscuro Sofía- ¿Cómo sabía mi verdadero nombre?- Perdón necesito hablara a solas con ella.



-Claro, no pasa nada verdad niños, de por si ellos ya deben irse preparando, el sol ya ni esta y se está haciendo tarde por lo cual es mejor que toquen de una vez, Carla te esperamos allá afuera- Dijo Isabel viendo a la vidente-.



-¿Cómo sabes mi nombre?- pregunte con un frio en mi cuerpo-.

-Tú me lo has dicho, tu mente es muy débil cariño, cualquiera puede entrar en ella, pero no es eso lo que importa ahora, se quién eres- dijo ella cogiendo mis manos-.



-¿Qué es lo que ves?

-Tu futuro es un poco diferente al de una persona norma, es más oscuro de lo que creía, te has acercado a tu pasado, el cual te puede lastimar. Ten cuidado, en un tiempo no muy lejano algo o alguien querrá hacerte daño- cerro sus ojos y movió un poco su cabeza- parece que alguien no te quiere cerca de tu amado, puedo ver una mujer en todo esto, no logro verla bien…



-Intenta verla, necesito saber quién es- dije apretando mis manos-.

-Es Joven, con cabello negro, por lo que veo influye en la vida de él, pero no logro ver el lazo que tienen… Hay algo más, una mujer de cabello rojizo quiere hacerle daño, pero ten cuidado ella también te vigila, lo mejor es enfrentarla pronto, tal vez haga alguna alianza con alguien para causarles daños- Respiro hondo mientras yo quería seguir escuchando todo lo que vendría en mi vida-.





Ella soltó mis manos y se levanto frente a mí, parecía que lo que había visto era tenebroso, algo que le dio miedo.

-Ellos no quieren que te acerques a él, hay algo en tu pasado que marco la vida de todo esto, tal vez no logres recordarlo, tu deber es buscar en tus recuerdos el porqué de su separación, busca bien que lo encontrarás…- dijo ella dándose la vuelta y retirándose-.

No entendía nada de lo que me había dicho la mujer, lo único que entendía era que la familia de Fernando no me quería cerca de él, por otra parte la mujer que me había atacado en el cementerio estaba detrás de Fernando, pero no lograba descifrar quien eran las otras dos mujeres y cuál era el papel en mi futuro, la mujer se dio la vuelta y me miro con aquellos ojos de paz interior.

-No te preocupes Carla, tu destino no está escrito, en esta vida todo puede ser cambiado solo hay que saber cual pieza hay que mover, te deseo suerte en tu vida…- La mujer siguió su camino como si nunca me hubiera visto, cantando una canción en otro idioma-.

Era cierto nada estaba escrito y podía impedir todo lo que esa mujer había dicho de mi futuro, pero primero debía de saber quien eran las dos mujeres que me faltaban.



El concierto de Chris y Marco había comenzado, así que decidí salir a verlos más de cerca. Isabel y Alicia solo gritaban para animar a sus amigos, no había demasiada gente y no se podía decir que era un concierto genial, pero tenían el ritmo y me gustaba, tal vez un poco de practica aria a estos chavales unos verdaderos músicos de primera.



-Por lo menos no nos hicieron pasar el ridículo con su tocada- dijo Isabel viendo a su novio en el escenario-.
-Bueno gracias a eso no han tirado ningún tomate- dijo Alicia gritando con fuerza-.
-No me puedo quejar tienen talento para esto, tal vez no son los mejores, pero bueno son buenos- dije para romper un poco el hielo-.


El concierto había terminado, por lo cual Chris y Marco estaban más que agotados, pero tenían una sonrisa en el rostro estaba felices o eso parecía, lo importante no era ellos si no que la gente le gustará su música.





El lugar se fue vaciando mientras nosotros regresábamos nuevamente a casa.

-Niña cuéntanos que te dijo la bruja esa- dijo Isabel con curiosidad-.

-¡Sí!, me gusta escuchar lo que siempre dice esa mujer del futuro, a mí una vez me dijo que me enamoraría de alguien, el problema fue que lo asesine antes de casarnos, esa sangre roja era tan deliciosa… Gracias a eso me volví vegetariana y ahora solo como animalitos del bosque- dijo Alicia con una carcajada-.

-En resumen, me dijo que dos mujeres estarían en mi vida, alguien impediría mi amor y cosas así…- dije para no dar más información-.

-Así que dos mujeres, y amor no posible, bueno esto es solo cosa de la loca esa, no hay que hacer mucho caso, pero bueno tampoco hay que olvidarlo- dijo Marco con cara de preocupación-.



Ellos salieron pro su comida fresca, para no llamarle de otra forma, a veces tenía miedo de que un día yo fuera su presa, pero tenía confianza de que eso nunca pasaría, el sábado para mí se había acabado y ahora solo quedaba descasar para poder recuperar fuerzas…

jueves, 14 de junio de 2012

La bruja y el lobo

El pueblo estaba en la casería de brujas, quien podría creer que un pueblo como Wosbru existieran esa clase de persona, por lo que se decía se les podía ver en el bosque y en el día se comportaban como personas normales. La noche había llegado y en medio del bosque se encontraba aquella mujer de aspecto joven y cabello amarillo apreciando la luna entre los árboles. Alrededor de la fogata dijo su nombre una y otra vez esperando que apareciera entre la oscuridad.

-¡Harry, Harry! Sé que estas aquí, ven a mí, Harry no tengo mucho tiempo- dijo mientras observaba el bosque-.


neblina llenaba el lugar haciendo una escena terrorífica, la joven de cabello lacio puso sus manos en el fuego mientras ardía el calor de aquella fogata, como arte de magia aquella leña se prendió aun más. –Harry no me hagas quemar tu bosque- dijo ella viendo los arbusto, un aullido sonó una y otra vez en el bosque, se acercaba más al lugar en donde estaba ella. 



Entre los árboles se podía ver aquellos ojos marrones corriendo, era un animal que poco a poco iba tomando la forma de un hombre grande y corpulento con cabello largo.

-Mi dulce bruja, te atreves amenazar al que te ha cuidado durante estos últimos años, que fuerte te has hecho- dijo el hombre acercándosele-.

-Mi familia me enseño todo lo que sé, no podía desperdiciar esta oportunidad de heredar esos poderes- dijo ella apagando la fogata-.


Los arbustos se movieron entre la oscuridad del lugar, solo la luna iluminaba la zona, el hombre la abrazo fuerte y la beso. La neblina se mostro mejor ahora mientras ellos se besaban, que estaba pasando en el lugar, nadie lo podía saber. 


Entre la oscuridad se escucharon pasos, se apreciaba entre los arboles varios ojos rojos, El lobo soltó a su amada y observo aquellas criaturas, los vampiros se encontraban el lugar.

-¡Alejad de ella!- grito el hombre mostrando su mandíbula con un leve rugido-.

-Ella tiene el poder de sacar a los nuestros, ella abrirá la tumba en donde los tienen encerrados, dármela, dármela- dijo uno de los vampiros-

-Clove huid de aquí- Grito el señalando a su amada-



Clove corrió, rápidamente por el bosque mientras Anselm se quedaba con aquellos vampiros, la luna subía más por los cielos mientras que los animales corrían por el lugar. En el pueblo se comenzaba a organizar una caza de Brujas, los habitantes ya tenían las antorchas encendidas con ganas de quemar a las brujas del pueblo, se había identificado algunas de ellas cerca de los poblados así que no sería duro llegar a sus hogares. 


Anselm estaba siendo atacado por aquellos demonios de la noche, nunca se había visto el ataque de vampiros contra lobos, pero se comenzaba hacer un odio entre ellos, por lo tanto si asesinabas a uno de ellos era dar la guerra eterna de estas dos razas. Anselm sabía el punto débil de cualquier vampiro en la tierra, la “antisip” una formula producidas por brujas que causan quemaduras en el cuerpo de cualquier vampiro, Anselm no se dejaría asesinar antes de defenderse así que hecho la sustancia en uno de ellos amenazando a los demás de tener guardar más de esa sustancia en sus bolsillos.

-Sabía que no serías un lobo fácil, pero tranquilo somos más que tu, y la antisip no te alcanzará para todos nosotros-.

-Solo hago tiempo estúpido Demonio- dijo el viendo la luna irse un poco-.

-No te preocupéis que aunque llegue el sol la neblina nos cubrirá del daño que nos causa, el bosque nos protege- dijo uno de ellos viendo a Anselm-.


Clove llego por fin al pueblo preocupada por su fiel enamorado, se escabullo entre la población sin darse cuenta que la matanza se acercaba. Entro a su hogar y recogió su libro de conjuros, lo hechizo para que quedara del tamaño de un ajo, para así trasportarlo, estaba a punto de huir, cogió todas su cosas e hizo lo mismo que con su libro, tenía todo guardado en una pequeña bolsa de su vestido, ya estaba lista para emprender el camino.


Clove se acerco a una cuna de su casa en donde estaba un bebé.

-Cariño tendrás que soparte la perdida de tu madre, los vampiros me quieren muerta y tu padre esta bueno, el está luchando por salvarnos, sé que no me entenderás pero recordarás esto siempre- dijo ella cogiendo a su bebé-.


Ella cogió a su bebé y salió de su hogar abandonando a su tierra, en fondo de la ciudad se acercaba una turba furiosa se de fuego y rencor contra las brujas, y ella era una. Su último conjuro en esta vida sería invocado hoy, señalo la turba y encendió más las llamas de aquellas personas, un calor insoportable comenzaba hacer mientras el llanto del poblado comenzaba, siguió caminando a su lugar para buscar un refugió a su niña.


El lobo vio la ola de calor que venía, estaba herido y a punto de morir, pero tenía una escapatoria, no todo estaba perdido, cogió fuerza y corrió hacia la ola de calor, los vampiros lo siguieron, pero lo dejaron ir, el calor los mataba más que el sol, así que Anselm pudo salvarse esta vez, pero su esposa en donde estaba, no lograba ya olerla cerca por lo cual estaba más lejos de lo normal. Anselm sabía que ella escapaba pensando que él estaba muerto así que decidió seguir el camino que su olfato le mandaba.


Clove había caminado demasiado y estaba cansada, sus poderes no tenían fuerza para nada y debía continuar, pero el peso de su hija lo impedía, así que tomo una decisión dolorosa, ella sabía que pronto moriría así que dejo la vida de su infante en manos de la naturaleza, la coloco en el rio y entre su manta coloco la bolsa de ajos, utilizo su ultima fuerza e hizo que la pequeña pudiera flotar en el agua fría y cristalina, había dejado ir a su hija.


Del otro lado del fuego estaba aquel clan oscuro y siniestro de vampiros planeando la forma de asesinar al lobo y a su mujer.


-Caín eres el más joven de todos, deberás de usar tu habilidad y encontrar a la bruja antes que el lobo, nosotros nos encargaremos de los demás lobos de la zona- dijo el jefe del clan ordenando al discípulo más joven-.

-Si padre, quiero probar la sangre de esa mujer, saborearla y devorarla a la luz de la luna-.


El licántropo estaba cerca de su amada podía olfatearla, pero un aroma diferente había en el lugar, un no-muerto se encontraba allí, y se movía a gran velocidad entre las sombras y los arboles, el lobo no podía seguirle el paso por las heridas causas por los vampiros pero si podía intentar salvar a su esposa e hija.


Clove estaba más que cansada, no tenía ganas de seguir, su vida había acabado y solo quería descansar. Caín la vio de lejos hay parada sin movimiento, olio su sangre, su cuerpo tenía sed, quería matar. 


Anselm había llegado pero no tan cerca para proteger a su amada, Caín le había clavado sus colmillos en el cuello como un animal, se la estaba devorando poco a poco, la sangre corría pintando el rio de rojo, Clove gritaba mientras Anselm lloraba solamente, no podía hacer ya nada, si atacaba a Caín moriría en el instante.



Del otro lado del bosque la casería de lobos comenzaba, se corría la sangre de ellos por todo el lugar, los vampiros se los comían, o solo los mataban sin compasión, la Luna ya no estaba y ellos perdían gracias a eso. Los vampiros habían dominado a los lobos solo dejando algunos sobrevivientes que por suerte pudieron escapar hacia las montañas. La guerra entre los licántropos y vampis había comenzado.


Caín estaba como una bestia, había perdido la cordura, asesino a un bruja y quería más sangre, no reaccionaba y nada le quitaba la sed. De lejos pudo ver a Anselm el cual solo lo veía con odio, Anselm intento huir pero no pudo, el poder de un vampiro luego de ingerir sangre fresca es impresionante. 


El lugar se baño de sangre de dos enamorados mientras Caín se llenaba más de ganas de matar, no podía controlar su sed. 



Corrió con su clan para poder calmarse en donde lograrlo controlarlo.

-Muy bien hecho hijo mío, sabía que no me defraudarías, el clan se siente orgulloso de ti- dijo su padre abrazando a su hijo-


-Nunca los decepcionaría, nunca me iría de su lado- dijo Caín sonriendo-


Brigesport: Actualidad

En aquel lugar llenos de luces, entre las montañas se podía ver aquella bella dama, buscando venganza de los que alguna vez asesinaron a sus padres hace 149 años atrás dejándola sola en el mundo, su madre le dejo todo lo que ella debía saber y heredar, el libro de hechicería era su única salida para asesinar a los que alguna vez la hicieron sufrir. Su nombre Rina Hallen descendiente de una bruja y un hombre lobo, es una de las pocas sobrevivientes de la casa de bruja en el mundo. 


Se teletrasporto como cualquier bruja antigua y camino por la ciudad, ahora viviría sola en una de las casa de la ciudad, en donde planearía la venganza contra el clan de aquellos vampiros sin piedad y de paso asesinar primero a Caín, le causante de la muerte sin dolor de sus padres. Ustedes se preguntarán como ella supo todo esto, sencillo en aquel saco de ajos había una especie de guarda vidas, el cual muestra las últimas horas de sus padres antes de morir…

Rina no solo era una bruja cualquiera, ella podía traer a todas las brujas del mundo para unirse a su causa, solo que ella no lo sabía, era el secreto que nunca su madre le contó. 

-Por la sangre de mi madre, por el cuerpo de mi padre, Me vengaré hasta verte morir…